Fosfolípidos.


Contenido tomado y transcrito del blog:

http://www.infinitefractal.com/movabletype/blogs/my_blog/fosfolipido-definicion.html

«Fosfolípido: definición, descripción
Los fosfolípidos son los principales componentes de la membrana celular, así como también lo son de la estructura liposomal. Forman parte de los llamados lípidos estructurales, y, como molécula, su característica principal es su caracter anfifílico, es decir una parte de la molécula tiene afinidad por el agua, hidrófila, y la otra por la grasa, lipófila.

Estos fosfolípidos pueden tener distintos orígenes o fuentes; naturales, sintéticos o semisintéticos.

Los fosfolípidos naturales, a su vez, pueden tener también distintos orígenes: como la soja, el huevo, las semillas de calabaza, el krill,…. los más utilizados son los extraídos de la soja.

Como he comentado anteriormente las moléculas fosfolipidicas se caracterizan principalmente por ser anfifílicas o anfipáticas, es decir, tienen una parte hidrófila (polar) y otra lipófila (apolar), de esta característica deriva sus más importante función, que es la estructural, al ser el componente principal de las membranas celulares.

Un fosfolípido está construido de un glicerol, un grupo fosfato y dos cadenas de ácidos grasos (lípidos). Al grupo fosfato se le une otro grupo de átomos como por ej: colina, serina o etanolamina, y otros que a veces poseen carga eléctrica. 

Los fosfolípidos se clasifican principalmente según sus distintas cabezas polares o hidrófilas. 

Los más importantes son:

– fosfatidilcolina

– fosfatidiletanolamina

– fosfatidilserina

– fosfatidilinositol

La fosfatidilcolina es el más importante estructuralmente a todos los niveles, y, también el más frecuentemente utilizado en la producción de liposomas, estructuras análogas, por no decir idénticas a la de la membrana celular.

Los ácidos grasos de las colas polares se diferencian por el número de átomos de carbono, así como de dobles enlaces o insaturaciones de la molécula y dependen, en gran medida, del origen del mismo.

Estos pueden estar totalmente saturados, como es el caso de los fosfolípidos hidrogenados, parcialmente saturados, insaturados , como los fosfolípidos de la soja y del huevo, ó, poliinsaturados, como en el caso de los fosfolípidos de krill, muy ricos en omega-3.

En el desarrollo y producción de liposomas, los diferentes fosfolípidos se utilizan para conferirle a la estructura unas características fisicoquímicas y estructurales determinadas para que su comportamiento sea el adecuado o necesario para alcanzar su objetivo o la función buscada.

La densidad de empaquetamiento, flexibilidad, resistencia osmótica, estabilidad «in vivo» e «in vitro»,  permeabilidad, carga eléctrica, capacidad antigénica, etc…, también serán determinados y condicionados por la composición de la bicapa fosfolipídica.

Se han sintetizado nuevos fosfolípidos con el objetivo de controlar al máximo estas condiciones y características. Por ejemplo DMPC, DPPC, etc… 

La variabilidad propia de los fosfolípidos de origen natural, hace que muchos científicos prefieran trabajar con los fosfolípidos más definidos de origen sintético o semisintético.

Los fosfolípidos, por ej. la PE, también se utilizan para anclar anticuerpos, u otras moléculas como polialcoholes, con el fin de, en determinados tipos de liposomas, aumentar la estabilidad «in vivo», mejorar la especificidad, prolongar el tiempo de circulación, y la eficacia general de los mismos.

Además de fosfolípidos, en la producción de liposomas también se pueden utilizar otras moléculas lipídicas y compuestos análogos, como por ejemplo el colesterol.

Todas estas diferencias condicionaran las características y el comportamiento de la membrana liposomal y del liposoma.

Además de bicapas y liposomas, los fosfolípidos al ser hidratados también se pueden estructurar en forma de micelas y bicelas. Éstas también se utilizan para el transporte de principios activos, pero, por sus propiedades y características, mucho menos adaptables y flexibles que las del liposoma, sus aplicaciones son menos amplias y versátiles.   

Representación esquématica de un fosfolípido

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Diferentes fosfolípidos, lípidos y análogos que pueden utilizarse en la producción de liposomas

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Representación esquématica de una bicapa fosfolipídica


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Representación esquématica de una micela

Una micela es una agregación de moléculas anfifílicas formando estructuras coloidales, en las que moléculas se ordenan con sus extremos hidrófobos (apolares) orientados hacia el interior, mientras que sus extremos hidrófilos (polares) se orientan hacia el exterior.

Diapositiva11.jpgDiapositiva28.jpg

Representación esquématica de una bicela

Son estructuras de base fosfolipídica ordenadas en forma de disco o galleta, constituidas a partir de un centro formado por una bicapa fosfolipídica  y una periferia compuesta por otro/s fosfolípido/s de cadena más corta, u otras moléculas anfifílicas, por ej. tensoactivos, dispuestas rodeando al disco centra

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Ambas estructuras, micelas y bicelas, se utilizan para aplicaciones puntuales y concretas. 

En ellas, al igual que en los liposomas, se  pueden incorporar principios activos básicamente liposolubles y otras moléculas lipófilas para su transporte o estructuración. Su poca capacidad de adaptación a entornos de diferente polaridad, así como su poca resistencia a cambios del medio, hacen que su estabilidad «in vivo» sea escasa y con ello también sus aplicaciones.»

El autor es Pedro González Enseñat-Puerto de Andratx 

e-mail de contacto: pgonzalez@enocsolutions.com

 

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